Se impulsará la cultura bajo corresponsabilidad en Oaxaca

Para el 2017, a la Secretaría de las Culturas y Artes de Oaxaca (Seculta) se le asignaron 155 millones 261 mil 194 pesos, de los cuales más del 93 por ciento está destinado para el pago de nómina, servicios generales, materiales y suministros, es decir, 145 millones 324 mil 477 pesos, mientras que sólo el 6.4 por ciento del presupuesto es para proyectos culturales, que se traducen en 9 millones 936 mil 716 pesos.

Ante este panorama y luego de saldar los adeudos de la pasada administración en materia de cultura (con quienes contaban con CLC) la titular de la dependencia, Ana Vásquez Colmenares expresó que se impulsarán proyectos, pero en corresponsabilidad con los gestores e impulsores de proyectos provenientes de la sociedad civil. Había varios colectivos que recibían subsidios, dijo, de ahí que revisaran la manera en que se está trabajando.

Y es que recordó que al tener una subsecretaría y tres direcciones generales, es una secretaría que opera con un tercio de la capacidad original para la que fue concebida.

“El modelo del siglo XX del estado de bienestar que simplemente da subsidios de manera directa, sin pedir corresponsabilidad, es un modelo que se agotó. Estamos trabajando y dialogando con los colectivos, artistas, promotores y gestores culturales para ver nuevas formas de interacción social que muchas veces incomodan”.

Asimismo, la dependencia competirá con otras secretarías por proyectos de inversión, además de trabajar con diputados federales para ampliar la bolsa de recursos.

A la dependencia, explicó, le faltaría diseñar su propio presupuesto, ya que el que se ejerce fue dejado por la pasada administración para sus propios objetivos y ello, junto a la eliminación del Fondo Piso (que llegó a 34 millones en 2016) afectó el apoyo a la cultura.

Parte del presupuesto de 2017 se destina a la nómina de la dependencia, que hasta inicios de año comprendía a 724 empleados (447 de base y 277 de confianza) y que ha aumentado en los últimos tres meses, dijo que se sigue en el trabajo de depuración y de invitar a los colaboradores a ser más participativos.

UNA SECRETARÍA CON DEUDAS Y POCO RECURSO

Vásquez Colmenares dijo que a su llegada a la dependencia había varios adeudos, incluso con programas federales en los que el Estado debió aportar una parte para destrabar bolsas de fondos mixtos.

De ahí que trabajara en el pago de adeudos tenidos por la pasada administración desde 2013 y con ello volver a operar con entes como la Fundación Harp, que había retirado fondos de proyectos como el programa PACMYC.

Aparte de los adeudos que tenía la secretaría con la Federación, había otros con instituciones a las que se les daba subsidios o apoyos diversos, pero “por parte del gobierno del maestro Alejandro Murat se cumplió el compromiso de honrar los adeudos en materia de cultura con todos los que tenía CLC”.

LA CULTURA COMO DERECHO

Aunque mencionó que durante el sexenio se plantea la creación del Centro Cultural Álvaro Carrillo, en donde se ubica el teatro del mismo nombre, dijo que el tema de la infraestructura no puede ser toda la base para la cultura en el estado y que en el caso de la infraestructura cultural municipal es responsabilidad de los municipios.

No obstante, remarcó que la cultura y el apoyo a expresiones artísticas y culturales no son algo accesorio ni para el tiempo libre, sino que “las políticas culturales pueden ser muy importantes en el tema de la cohesión social y regeneración del tejido social”.

De ahí que se trabaje de forma coordinada con otras instancias gubernamentales como la Secretaría de Desarrollo Social y Humano con las que se visitan las comunidades del estado para -desde Seculta- promover la lectura e identificar las necesidades de los municipios.

“La cultura tiene un peso crucial y fundamental en que esta sociedad pueda retomar una vida más armónica, cohesión social y valores”.

EJES TRANSVERSALES QUE SE APLICAN

Ana Vásquez detalló que habrá una regionalización de la cultura, por lo cual se han acercado con grupos en diversas partes del estado y abierto la puerta a expresiones culturales que antes no habían sido tomadas en cuenta. Asimismo, atender los tres ejes de políticas transversales en el gobierno: equidad e igualdad de género, asuntos indígenas y fortalecimiento de capacidades para niños y jóvenes.

Por ello, y atendiendo a la participación en forma de corresponsabilidad, se pretende que Seculta participe en la Feria Internacional del Libro de Oaxaca a través de un pabellón infantil y juvenil.

En cuanto a igualdad de género, recordó que para los Lunes del Cerro habrá dos voces, de un hombre y una mujer. Aunado a ello, se busca promover mayor inclusión de mujeres en las agrupaciones musicales, pues ellas son menos del 15 por ciento en las bandas de música como la del estado y la sinfónica.

Las lenguas indígenas se atenderán en el ámbito de su fomento, para lo cual trabajan de cerca con el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca y la Secretaría de Cultura Federal.

LA RELACIÓN CON FRANCISCO TOLEDO Y LA FUNDACIÓN HARP HELÚ

Aunque dijo mantener una relación de respeto y cercanía con el maestro Francisco Toledo, Ana Vásquez indicó que no existe una formal o institucional. “En el caso del maestro Toledo, las lenguas indígenas son muy importantes y estamos trabajando en cursos en el CaSa (Centro de las Artes de San Agustín)”. Ante ello, se tratan de replicar proyectos del CaSa en otras partes del estado.

“(Toledo) tiene claridad sobre las grandes líneas estratégicas de la cultura en Oaxaca”, dijo. Sin embargo, se ha desligado un poco para dedicarse más a la pintura, pero ha dejado a su hija Sara para que siga la colaboración.

Con la fundación, dijo que ha habido reuniones en conjunto con el Instituto Nacional de Antropología e Historia para abordar los proyectos y la búsqueda de recursos.

Construirán nuevo complejo cultural

Debido a severas deficiencias estructurales, el Teatro Álvaro Carrillo será demolido y en su lugar se creará un complejo cultural que integrará el parque donde se encuentra el Monumento a la Madre, anunció Ana Vásquez Colmenares Guzmán, secretaria de Seculta.

Además, se exigirá a la constructora del Centro de Iniciación Musical de Oaxaca (CIMO), corrija serias deficiencias que se han detectado en el inmueble, razón por la cual el Gobierno del Estado no ha recibido la obra que se realizó con una inversión superior a los 118 millones de pesos en la pasada administración.

Durante una entrevista con EL IMPARCIAL, la responsable de la política cultural del Gobierno del Estado, admitió que se revisa un proyecto cultural integral ante la inminente demolición del Teatro Álvaro Carrillo.

Ante el severo daño estructural resentido en los últimos años, pues desde 2015 se dejó de dar mantenimiento en todas sus áreas, tanto hidráulicas como eléctricas, sanitarias y otras más, el inmueble ya no cumple con las normas de seguridad vigentes.

El deterioro que poco a poco se fue haciendo más severo, prácticamente dejó en precarias condiciones la posibilidad de garantizar la seguridad de los mil 200 espacios para el público asistente al teatro, pues dejó de cumplir con las normas vigentes en caso de sismos.

De ahí que a través de la Secretaría de las Infraestructuras y Ordenamiento Territorial Sustentable (Sinfra), se ha dispuesto su demolición, así como las actuales oficinas de la dependencia y empezar a elaborar un proyecto integral.

La construcción del teatro empezó en 1985, durante el mandato de Pedro Vásquez Colmenares, luego de que Petróleos Mexicanos (Pemex) cediera esa amplia extensión de terreno para fines exclusivamente culturales. “Por eso se pretende un proyecto cultural integral para mantener y conservar el terreno, ya que cualquier otro tipo de obra podría generar devolver el predio”, indicó.

La responsable de la Secretaría de las Culturas, también reconoció que después de siete meses de nueva administración, no se ha recibido el Centro de Iniciación Musical de Oaxaca (CIMO), debido a la serie de anomalías e irregularidades detectadas en la obra.

Explicó que a través de un estudio preliminar se detectaron deficiencias en la interpretación del proceso constructivo y la inspección física consideró que hay afectaciones estructurales tanto en losa como en muros de concreto armado.

Además de que su construcción se hizo en un terreno donde hay dos fallas geológicas y el diseño de su auditorio para 500 niños los coloca en riesgo de sufrir un accidente.

Lamentó que los trabajos se hayan realizado con mala calidad en los acabados y serias deficiencias en instalaciones, lo que ha obligado a exigir su rehabilitación a través de las fianzas, pues no se va a aceptar una obra con graves irregularidades.