Entre carencias, educación y música del CIS de Zoogocho
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Entre carencias, educación y música del CIS de Zoogocho

Si realmente se quiere apoyar a las comunidades, se tiene que pensar en un incremento: directora del CIS 8


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“La incorporación del indio a la cultura debe hacerse no como un acto de caridad, sino de justicia”. Esa es la cita que se le atribuye al expresidente Lázaro Cárdenas del Río y que se observa en una fotografía de 1967, año en que el militar y político mexicano acudió a San Bartolomé Zoogocho para atestiguar la inauguración del Centro de Integración Social 8.

Han pasado más de 50 años desde aquel momento en la Sierra Norte del estado. Pero han transcurrido más desde la creación del Centro de Capacitación para Jóvenes Indígenas, en 1952, y que actualmente se conoce como Centro de Integración Social número 8 “General Lázaro Cárdenas”.
Partiendo de 1952, se habla de casi 66 años de historia en este centro que sigue operando entre carencias, pues a decir de su directora, Manuela Veneranda Luna Ríos, padece de los recortes presupuestales. Y ello ha llevado a que sus estudiantes sobrevivan con 28 pesos diarios, considerando una semana de lunes a viernes, mientras que para los sábados y domingos se carece de presupuesto.

Incluso, explica la docente, la disminución de personal (de 32 a 26) ha llevado a los trabajadores que permanecen a duplicar o triplicar sus jornadas laborales. También a que los trabajadores tengan que atender las necesidades de salud de los estudiantes con un botiquín, pues el personal médico dejó el centro a raíz de la falta de pagos.

El CIS de Zoogocho es uno de los 25 que operan en el país, en los estados de Chiapas, Chihuahua, Guerrero, Estado de México, Michoacán, Puebla, San Luis Potosí, Veracruz, Sonora y Oaxaca. Su creación es antecedida por los Centros de Capacitación para Jóvenes Indígenas, que empezaron siendo 11 en 1933. No obstante, su situación replantea la frase de Lázaro Cárdenas cuando habla de caridad, pues a decir de Veneranda el apoyo es muy raquítico:

“Ahorita nadie come con 28 pesos; prácticamente, los niños están recibiendo 9 pesos con 33 centavos en el almuerzo, en la comida y en la cena”.

CON PROYECCIÓN MUSICAL, PERO SIN APOYOS

La banda de música del CIS 8 ha logrado la proyección gracias a su participación en la inauguración de la Fórmula 1 (2017) y la “viralización” de un video en el que interpretan una versión del tema Despacito. Sin embargo, las condiciones actuales del centro en que conviven estos músicos y el resto de los más de 200 estudiantes (138 de nivel primeria, 52 de secundaria y 50 en el área de especialistas) se torna complicada:

“Hay muchas necesidades (…). El apoyo que necesitamos es el incremento, y no sólo es el Centro de Integración Social (8), sino todos los CIS que existen a nivel estatal. Si realmente se quiere apoyar a las comunidades, se tiene que pensar en un incremento”, añade Veneranda, quien por casi seis años ha estado al frente del CIS de Zoogocho.

Actualmente, el CIS cuenta con becas del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (para los alumnos de nivel primaria), de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (para los de secundaria), mientras que otros recursos se obtienen a través de la labor del taller de música, de tal forma que este taller se pueda mantener. No obstante, algunos recursos, instrumentos y demás apoyos se han conseguido de manera independiente.

La situación del CIS 8 se observa en el plano de las becas, pero “ni se diga en cuanto a infraestructura”, agrega Veneranda. Y es que tan sólo con recorrer las instalaciones se percibe el deterioro de la cancha de basquetbol, el área de ropería y lavandería (reubicada por las filtraciones y otros daños surgidos con el tiempo).

En este Centro de Integración Social, que opera a 110 kilómetros de la capital del estado, los sismos del pasado mes de septiembre también provocaron algunos daños.

La banda de música, que en 2010 recibió un piano donado por el artista español Miguel Bosé, ensaya en un espacio que inadecuado, ya que “requieren de un espacio más amplio”, explica. Eso, sin contar con las necesidades de instrumentos que señala Camilo Jiménez, quien por 23 años ha sido responsable del área de música.

El CIS ha sido cuna de muchos músicos de la región, es uno al que acuden infantes y jóvenes de las regiones Chinanteca, Mixe y de los Valles Centrales. Es también uno que ha dado pie a la creación de bandas en las comunidades de la zona.

Por la cantidad de alumnos, explica Jiménez, comparten instrumentos. Sin embargo, los escenarios a los que ha llegado, han influido en la ampliación del repertorio, hacia uno sinfónico y que por ende requiere de otros instrumentos:

“Estamos en ese proceso de la formación de la banda sinfónica, pero sin dejar de lado el trabajo que estamos haciendo en las comunidades”.

SIN PRESUPUESTOS POR DEFINIR

En Oaxaca, son seis los centros de este tipo que se encuentran en la estructura organizacional de la Unidad de Educación indígena del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO). De acuerdo con esta instancia, los seis CIS reciben “recursos materiales, financieros y humanos que provee el instituto” y con ellos se “sufragan gastos de hospedaje y alimentación de los alumnos que permanecen internados durante el ciclo escolar”.
Ubicados en Guelatao de Juárez, San Bartolomé Zoogocho, Eloxochitlán del Flores Magón, Santiago Yosondúa, Tuxtepec y San Juan Copala, los seis CIS de Oaxaca tuvieron un presupuesto global de más de 6 millones 800 mil pesos, de acuerdo con datos proporcionados por el IEEPO.

En estos espacios, la SEP “ofrece educación primaria, además, desarrolla funciones y acciones para atender la demanda educativa de capacitación laboral y asistencial de la población estudiantil indígena de 6 a 12 años y de escasos recursos económicos a niños y niñas que provienen de comunidades de muy alta marginación y que dominan una lengua materna indígena”.

Los CIS como el de Zoogocho son centros de los que han surgido bandas de música, como parte de sus talleres, y que han participado en los conciertos organizados por la CDI. En el caso del CIS 8, sus participaciones han sido varias, aunque por compromisos en otra comunidad y cambio de fechas no estuvo en el último desarrollado en diciembre pasado.

Sobre el décimo Concierto de Bandas de Música de los Pueblos Indígenas de Oaxaca, de 2017, la CDI mencionaba que este tipo de recitales “toma en cuenta el impacto de los apoyos destinados a la música indígena; ya que un 85 por ciento de los apoyos otorgados por la CDI son destinados a la música indígena”.

De tal forma que “se propuso realizar los encuentros de carácter intercultural de las ocho regiones del Estado de Oaxaca con la participación de niñas, niños y jóvenes músicos, lo cual permite mostrar a la sociedad su talento artístico”.


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