Muerte materna gana terreno en Oaxaca
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Salud

Muerte materna gana terreno en Oaxaca

Activistas y especialistas en la materia aseguraron que el gobierno ha sido omiso ante las necesidades de salud de las oaxaqueñas, cuestión que aumenta la vulnerabilidad en este sector de la población


Organizaciones no gubernamentales denuncian opacidad y falta de transparencia en la construcción y funcionamiento del Hospital de la Mujer Oaxaca, mientras tanto, en Oaxaca la muerte materna sigue ganando terreno.

A propósito de la salud materna y reproductiva de las oaxaqueñas, la representante de la Red por Derechos Sexuales y Reproductivos (DDSER), Mayra Morales Aldaz, indicó que sólo en el discurso de campaña existen las mujeres y sus derechos a una atención de calidad se quedan en el olvido.

Representante e integrada en una red de organizaciones para la defensa de la atención médica, criticó la opacidad con la que se conducen los Servicios de Salud de Oaxaca y el retroceso del gobierno actual en la materia.

Actualmente, aunque con varias fechas postergadas, el Hospital de la Mujer sigue en los planes y proyectos del gobierno de Alejandro Murat, sin que se especifique el día y la hora en que comenzará a funcionar este espacio.

Omisión ante retraso

Al solicitar información reciente del avance de este nosocomio que fue construido con el fin de desahogar la demanda en el Hospital Civil, donde actualmente la atención a embarazadas es inapropiada por la sobresaturación, los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) omiten y callan ante una demanda de la población usuaria.

El titular de los SSO, Donato Casas Escamilla, ha hecho caso omiso a las peticiones de información para conocer el avance de este nosocomio que tiene más de una década de estar varado.

La versión anterior prometía la inauguración de este espacio médico para el primer bimestre de este año, sin embargo, el sector no precisó los tiempos y el avance del equipamiento.

La obra que inició en el sexenio del gobernador Ulises Ruiz -que la dio por concluida- y que Gabino Cué dijo que echaría a funcionar antes de que concluyera su mandato, sigue siendo promesa de las autoridades, y como bandera política en turno.

“Hay opacidad en la obra, no hay información y al final se puede observar un abandono para la atención de la mujer, eso, cuando la muerte materna se mantiene en el estado”, dijo Mayra Morales.

La representante de DDSER agregó que, aunque se prometió un equipo de punta, no existe claridad ni en el uso de los recursos, tampoco en la adquisición de los recursos y está la preocupación de que pueda continuar como pasó en sexenios anteriores.
Habló de gran necesidad de una atención a embarazaos en adolescentes para prevenir la muerte materna, y otras acciones en favor del sector.

“Como siempre a las mujeres no se nos considera como prioridad y se nos sigue relegando en materia de salud. En campañas escuchamos que las mujeres estamos siendo la prioridad y no hay acciones concretas. En varias administraciones existe incumplimiento cuando hay espacios que deben estar destinados a nuestra salud”, abundó.

Deuda con las embarazadas

El estado tiene una gran deuda con las embarazadas, principalmente las que vienen de comunidades indígenas porque carecen de servicios especializados como el que se debería darse en el Hospital de la Mujer.

Para subsanar eso, el nosocomio localizado en la agencia de Reyes Mantecón estaría equipado -según la proyección-con tecnología de punta y para eso, se requiere 187 millones de pesos, de los que los SSO ya tienen autorizados 115 por el gobierno federal y en espera de lograr 72 millones más en diversas gestiones, era la información del 2017.

Aunque la estructura del Hospital de la Mujer Oaxaqueña está casi listo se requieren 210 millones de pesos de la federación para echarlo andar con las primeras 30 camas y otros millones que necesita para la apertura.

Este espacio contaría con los servicios de urgencias, hospitalización, consulta externa de obstetricia, tococirugía, quirófanos de toco cirugía, Terapia Intermedia Adultos (UCEN), crecimiento y desarrollo, laboratorio clínico, imagenología (TAC, ultrasonido y Rayos X móvil), Unidad de Vigilancia Epidemiológica (UVEH), puesto de sangrado, así como nutriología y trabajo social, entre otros.

La proyección de los SSO es que para la operatividad de este nosocomio se requieren a 450 trabajadores que obtendrán de otros espacios médicos ya que carecen de la oportunidad de abrir plazas.

El plan de la instancia estatal era echar a andar este nosocomio en sus primeras 30 camas para descongestionar el Hospital Civil hasta en un 55 por ciento.


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