Autobuses urbanos de la muerte en el Istmo

Por los últimos tres accidentes que han protagonizado los choferes del transporte público urbano, en donde han enlutado hogares, integrantes de comités de vecinos demandaron a la Policía Vial Estatal, poner orden y sancionar a los responsables.

Y es que el pasado 9 de mayo, el conductor del autobús urbano, con número económico D-02, con ruta a la colonia Lombardo, atropelló brutalmente a la estudiante del Colegio Nacional de Educación Técnica Profesional (Conalep), Luisa Fernanda Rosado Campos, cuando intentaba cruza la avenida Tampico del Centro.

La joven quedó malherida, mientras que el cafre urbanero intentaba evadir la acción de la justicia, huyendo del lugar, pero metros adelante fue detenido.

En esa ocasión los padres de la menor realizaron una serie de manifestaciones, para exigir justicia y se frenaran estos accidentes que vienen cometiendo los choferes del transporte público. Pero no tuvo eco la demanda y el delegado de tránsito se lavó las manos, sólo sancionando al dueño de la unidad de motor, y continuó circulando con toda impunidad.

Dos meses después del accidente de la joven estudiante del Conalep, sobre la misma avenida Tampico, este viernes 27 de julio se repite otro incidente, al ser atropellado un adulto mayor de nombre Anatolio C. C., por el conductor del autobús con número económico D-10, con ruta a la colonia 15 de septiembre.

Pero esta vez, tanto el conductor como el cobrador huyeron del lugar para evitar que fueran detenidos, por haber lesionado a la persona de la tercera edad.

Ese mismo día, pero poco después de las 20:00 horas un cafre urbanero golpeó por la parte trasera al taxi 632, del sitio Libertad y lo precipitó hacia el poste del alumbrado público, sobre Calzada a la Refinería quedando prácticamente desecha la unidad.

Al interior tres personas resultaron lesionados, el taxista, una señora y su pequeño hijo de un año y medio, que falleció más tarde a consecuencia de los golpes.

Se dio a conocer que el pequeñito Lan S.A., murió en un hospital, por lo que ahora claman justicia sus familiares.