Siguen los pasos a dos asesinos en inmediaciones de San Juan Lachigalla, Oaxaca

Luego del asesinato de una joven en inmediaciones de San Juan Lachigalla, Ejutla de Crespo, elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) han iniciado una investigación para dar con el paradero del o los responsables del crimen.

Trascendió que la occisa se llamó, Rosa Isabel R. L., de 19 años de edad, originaria y vecina de San Juan Lachigalla, con domicilio en calle Donají, sin número del barrio San Miguel.

Según informes policiales, a las 23:25 horas, reportó vía telefónica Romualdo Ruiz Matías, síndico Municipal de San Juan Lachigalla, Ejutla de Crespo, sobre la existencia de un cadáver del sexo femenino al interior de una camioneta marca Ford, tipo F-350, con capacidad para tres toneladas, con redilas de color verde, con placas de circulación RX-53850 del estado, mismo que se encuentra estacionado frente al palacio municipal de dicha población.

Debido a ello, elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) se trasladaron al sitio indicado para realizar la inspección ocular, en la cual dieron fe de la existencia del cadáver, mismo que, a simple vista presentaba heridas en el pecho a la altura del corazón, producidas al parecer por proyectil de arma de fuego.

En la diligencia, los agentes se entrevistaron con el señor Ranulfo, de 52 años, quien refirió ser el padre de la occisa; asimismo, que desconocía cómo había ocurrido el ataque donde su hija murió.

Por su parte, el propietario de la camioneta, manifestó que, al circular sobre la terracería que conduce a San Juan Lachigalla, a la altura del paraje Los Morales, 300 metros antes de llegar al Cobao, al paso les salieron dos hombres con armas cortas, quienes comenzaron a dispararles.

Por tal motivo, dijo, al notar que su empleada se quejaba y al verla sangrar, decidió trasladarse al municipio para que la joven fuera atendida por el médico, mismo que, ya no pudo hacer nada por salvarle la vida y confirmó su muerte.

Fueron agentes investigadores quienes se hicieron cargo del levantamiento y traslado del cuerpo al descanso municipal del lugar.

Realizada la necropsia, un perito médico forense determinó que, la occisa, murió a causa de causa de una hemorragia interna intensa por laceración de ambos paquetes arteriales (yugular y cerebral) a nivel de cuello y de ambos pulmones causados por proyectil de arma de fuego.

Del caso, un fiscal del ministerio Público dio inicio a una carpeta de investigación en contra de quien o quienes resulten responsables del delito de homicidio.

Al cierre de la edición los agentes continuaban con las indagatorias para dar con el paradero del o los responsables.