La gasolina inflamable
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Debates y Deslindes

La gasolina inflamable

 


Lamentable desde cualquier punto de vista lo ocurrido en en el ducto Tuxpan-Tula, hasta este momento hay 61 personas muertas, 71 heridas. Es una tragedia provocada por las conductas equivocadas que dañan a toda la nación.

La honestidad de las gasolineras siempre ha estado en duda. Como los marcadores de los vehículos tienen la señalización en proporciones: tanque lleno, medio tanque, un cuarto de tanque, el usuario no tiene la posibilidad de comprobar cuántos litros le venden. Como el líquido sale de un tanque a otro, el consumidor está totalmente desprotegido para saber qué y cuanto le venden. Tener una gasolinera era un privilegio, un negocio seguro. Las concesiones las otorgaba el Presidente de la República.

Un columnista muy conocido de cuyo nombre no quiero acordarme, fue a pedirle a Gustavo Díaz Ordaz que le diera la concesión de dos gasolineras para ser independiente económicamente y no tener que corromperse pidiendo dinero a los políticos. Don Gustavo le dio esas concesiones y el periodista siguió extorsionando a los políticos.

La voz del pueblo decía que uno de los grandes negocios era la venta de gasolina por el margen de utilidad que dejaban y porque en raras ocasiones daban litros completos. Cuando trabaje en la Secretaría de Industria y Comercio me hice muy amigo del ingeniero José María quien era director de normas en dicha dependencia. Comentó que al llegar a la dirección los representantes la asociación de dueños de gasolineras de México le ofrecieron un millón de pesos semanales si les autorizaba poner las bombas en 95 por ciento de un litro y no el 100 que es lo que compraba el consumidor. En ese tiempo la ley era muy laxa y se consideraba legal dar 95 o 105 del total del litro.

Hombre honrado José María mandó modificar la ley y que las gasolineras estuvieran obligadas a entregar el 100 y no 95, ni 105.

Otra forma de estafar al consumidor es que le venden gasolina Magna por Premium, aunque una es de color verde y otra rojo el cliente no tiene posibilidad de comprobar la diferencia de color y mucho menos el octanaje. Corren en las redes un video demostrando que las bombas sean del color que sean venden la misma gasolina: verde.

Ahora nos enteramos qué además de estos negocios que tenían las gasolineras tenían el huachicoleo que es comprar pipas que salen sin control de las refinerías o gasolina que roban de los ductos y venderla a los precios oficiales. El robo es brutal, no alcanza la imaginación a concebir a donde van a parar estos 75 mil millones de pesos al año.

Las concesiones de las gasolineras siguen siendo muy codiciadas por estas y otras razones y solo se les da a comerciantes e industriales importantes, y principalmente a la clase política del país. Es uno de los grandes negocios que ha enriquecido geométricamente a decenas de familias.

No hay que ir muy lejos para saber quiénes son los que compran combustible robado, Como se cerraron los ductos, no tienen en este momento combustible. No porque Pemex no les haya surtido, no les han surtido los huachicoleros de cuello blanco a los que permanentemente les compraban el combustible robado.

El pueblo mexicano exige ya que se mencionen y se digan quienes son los atracadores de todo el consumidor de gasolina y del robo a la nación. Desde los funcionarios que se roban combustible en las refinerías, los técnicos de Pemex que participan en el atraco y las gasolineras que se enriquecen con esta rapiña.

Existe una legislación que señala y castiga el robo de combustibles y el robo en general, de manera que no hay pretexto para conocer el nombre de los huachicoleros y aplicarles un castigo ejemplar.

Ignorantes

Dentro del periodismo existen algunos golpeadores profesionales que tiran golpes y exhiben su ignorancia y su interés económico. Uno de estos plumíferos hace comentarios en Radio Red y al recibir la cartilla moral de don Alfonso Reyes que se editó por la Secretaría de Educación Pública, uno de los pocos textos que hablan directamente de la moral y la ética de una nación, sin leerla ni entenderla empezó a criticarla y sancionarla. Manifestó su descontento porque en el libro de Alfonso Reyes no se escribe sobre los derechos humanos, los derechos de los homosexuales, de la ecología y de otros tantos temas que constituyen la vida político social del Siglo XXI: Es evidente que no leyó el libro ni lo conoce porque criticar una reedición y no darse cuenta de la fecha y el momento histórico que se publicó denota además de ignorancia y falta de cuidado en la lectura, una clara mala fe. Acusar al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador de que Alfonso Reyes no haya tratado una serie de temas contemporáneos de la vida pública, es realmente vergonzoso.

El periodismo está lleno de tareas que lindan los terrenos de la ética y de la inmoralidad en un momento dado una crítica sana o un alago exagerado esta matizada por los acontecimientos contemporáneos. y al otro día o a la semana siguiente en que las circunstancias han cambiado no ser válida, esa es en cierta medida una de las condiciones de la vida política. Sin embargo no hay que caer en el cinismo, existe una ética personal y una ética universal, una serie de valores que desde hace más de 40 siglos constituyen un tronco de conducta que han traducido y reproducido casi todas las religiones y que buscan que el ser humano no se dañe a sí mismo, a sus semejantes y viva en armonía con la sociedad y con la naturaleza. Podemos ponerle el nombre que queramos pero están ahí firmes y la práctica cotidiana de ellos en lo personal produce una íntima satisfacción que nadie puede darle a uno pero que tampoco puede quitarle. Vivimos tiempos apasionados, las filias y las fobias se han agudizado pero es evidente que todos estamos en un barco que aunque sea un lugar común decirlo, es necesario, se llama México. Si a Andrés Manuel López Obrador le va mal, nos va a ir mal a todos y si a él le va bien, nos va a ir bien a todos, principalmente a los pobre y desamparados por los gobierno neoliberales.

El próximo escándalo que veremos de cómo se ha despachado la iniciativa privada a manos llenas con la energía eléctrica, cuando aparezcan los robos que se hacen a la Comisión Federal de Electricidad y se empiecen a caer y quitar los diablitos y
diablotes que existen en este país, vamos a ver el desastre que dejaron Fox, Calderón y Peña Nieto.

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