Indignación
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Columna sin nombre

Indignación

 


Qué pícaro el güerito, que Anaya es primo del secretario de Hacienda y concuño de Carlos Salinas de Gortari. Cosas veredes Sancho.
-El Mapache Guasón.

No recuerdo desde Woodrow Wilson, algún presidente de los Estados Unidos de América tan antimexicano y que llevara a la práctica una fobia de tal magnitud.
Es difícil conocer si existe alguna razón personal, algo en su vida privada, un sancho infiltrado que le lleve a denostar a México y a los mexicanos en esa forma.
El argumento con el que justifica enviar a la frontera con México a la Guardia Nacional, es francamente infantil.
Manifiesta que lo hace para proteger la frontera sur de su país contra la migración ilegal, y al analizar el hecho es obvio que ese cuerpo militarizado no cuenta con elementos suficientes para cubrir más de tres mil kilómetros de frontera, ni existe presupuesto para una movilización y mantenimiento de tales tropas, luego, es una inaudita manifestación virtualmente racista y xenofóbica en contra de nuestro país.

México es una república con un territorio estratégicamente vital para USA; somos amigos, vecinos y socios quienes además, estamos inmersos en una negociación pacífica para modernizar un tratado comercial de alta importancia para ambos países, y no solo eso sino también para Canadá.

En ese contexto, no es posible explicar y dar una razón lógica que pueda justificar tal acción, incluso si lo hace desde un punto de vista electoral para convencer a sus partidarios, y aún así, es una acción ilógica porque desprotege y mantiene virtualmente inerme su frontera norte.
Si quiere detener el flujo de drogas a los Estados Unidos, bueno, el narco es tan poderosos que bien puede hacer llegar su producto por el mar, por las playas y desde luego por el norte, entonces estamos ante una actitud de soberbia desmedida que lleva consigo una delicada afrenta a la dignidad de un país vecino y amigo.

Si sumamos esos hechos a los insultos verbales en los que llama a los mexicanos sin distingo alguno “asesinos,” “violadores”, “narco traficantes” y otros vituperios, es ya imposible mantenerse callado.

INDIGNACIÓN, esa es la palabra que describe el sentir de millones de mexicanos. Extiendo mi modesto pero irrestricto apoyo a las palabras del señor Presidente Peña Nieto, y felicito por enfrentar, finalmente, y parar en seco a tan imprudente mandatario.

Me sumo desde luego a las voces de millones de mexicanos y celebro el que declaremos que no tenemos miedo ni negociaremos con temor.

Yo también soy Pueblo
Por allí nos encontraremos