Para tomar en cuenta

En el año 2014, 86 personas tenían el ingreso de la mitad de la población. Para el año 2017 eran solamente ocho personas. Cada año unas cuantas personas se hacen, enloquecidamente más ricas, y cada día, más gente se hace mucho más pobre. Básicamente, los dueños de la Reserva Federal de Estados Unidos, -la empresa privada que hace los dólares-, son los que controlan el mundo financiero, bursátil y bancario del “mundo libre”. Que, a su vez, controlan a las 10 empresas supranacionales: Apple, Alphabet, Microsoft, Amazon, Facebook, BerkshireHathaway, Exxon Mobil, Johnson & Johnson, Jpmorgan Chase & Co, Tencent Holdings. El Mercado se ha apoderado totalmente del Estado. Cada una de estas empresas es más poderosa que un país, que no sea de las super potencias.

Oxfan, una ONG internacional muy seria, que trabaja en desarrollo, acción humanitaria, comercio justo y sensibilización, con el objetivo de erradicar la injusticia y la pobreza. Afirma que los “dueños del dinero” han secuestrado a las democracias. Es decir, que con dinero se ha corrompido el sistema democrático del “mundo libre”. Las empresas trasnacionales, “quitan y ponen” presidentes, o influyen sensiblemente en las democracias para que los políticos que ellas financian ilegalmente, obtengan los preciados votos.

La empresa brasileña Odebrecht, es un ejemplo muy nítido de un mal internacional. El dinero tiene el control de la política en “el mundo libre”. Odebrecht no es el caso más antiguo, ni el más grande, ni el más importante. Las grandes superpotencias del “mundo libre”, tampoco se salvan de este mal. Por el contrario, es ahí, justamente, en donde surge y se potencia este vicio corruptor, comenzando con el asqueroso e inescrupuloso “cabildeo” en Washington.

El “sistema” está muy bien planeado y diseñado por los dueños del dinero, que, desde 1776, con la creación de E.U., surgen los “Estados nación” a gusto y diseño del “nuevo orden mundial del becerro de oro”, sí ese, que está en Wall Street. Así pues, al derribar las monarquías europeas, empiezan a surgir por orden de los mercaderes las repúblicas a principios del Siglo XIX. El Mercado ha tomado el control del Estado, por medio de las corruptas democracias representativas, que se mueven a través del dinero. Más nada.

Como dijo -el Maquiavelo mexicano moderno-: “un político pobre…es un pobre político”. De la misma manera, un partido político pobre…es un pobre partido. Así que, amable lector, la “democracia de los mercaderes” es solo un asunto de dinero.

En el México neocolonial de ideología criolla, la incapacidad de los que nos han (des)gobernado desde 1824, ha sido brutal y calamitosa, no solo ha sido su histórica incapacidad, ineptitud e irresponsabilidad, sino, sobre todo, -o aunado a esto-, su desmedida corrupción. Desde Agustín de Iturbide, pasando por Santa Anna, Limantour, Alemán, Fox, hasta llegar a Videgaray, por citar solo algunos, esta gente ha ido entregando el país (su país), poco a poco, cediendo territorios, recursos naturales y soberanías. “Esta gente”, ve a este país (su país) como un negocio. Al pueblo como un activo para hacer dinero. La ley y las instituciones como medios para hacer sus negocios.

La impunidad, el cinismo y el desprecio absoluto, de todo lo que no sean sus intereses. Nuevamente, el caso Odebrecht, que ha tirado políticos y otros han ido a la cárcel, en México, no ha pasado absolutamente nada. La “estafa maestra”, el caso de los gobernadores delincuentes que roban para su partido, el caso Chihuahua, etc., nos demuestran que en “este país”, no existe Estado de derecho. Bandas criminales muy bien organizadas, usan las instituciones, los partidos políticos y las leyes, para el “imperio de su ley”.

La ignorancia y la pobreza de un pueblo es lo que garantiza el buen funcionamiento de la democracia de los mercaderes. Así es más fácil mentirles y se les compra por nada. El mejor negocio en México es hacer pobres, comprarles barato el voto y mandarlos de indocumentados para que envíen miles de millones de dólares sin invertir un solo peso.

Como creerles, en tiempo de elecciones, a aquellos que nos dijeron mentiras (de todos colores), y hoy, nos vuelven a decir mentiras para ganar un voto. El Mercado ya seleccionó quien ha de gobernar, “el que sea el escogido del becerro de oro”, ese será el bueno…haiga sido como haiga sido, así es, y así siempre será. Todo lo demás, es solo “pan y circo” para “engordar el caldo” y darle sabor…democrático. Más nada.

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