“Sismos exhiben decadencia de políticos” en Oaxaca
Los políticos fueron los que más aprovecharon la tragedia para promoverse con miras a las elecciones de 2018.
Para los habitantes de los municipios afectados por los sismos en el Istmo de Tehuantepec, los políticos fueron los que más aprovecharon la tragedia para promoverse con miras a las elecciones de 2018.
Consideraron que los militantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que hoy gobierna el estado y el país, fueron de los más beneficiados al encabezar la entrega de algunos programas gubernamentales, aunque también se sumaron otros partidos con la entrega de víveres para hacerse presente en la región.
Debido al protagonismo que cobraron algunos políticos, especialmente los diputados locales, el Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (IEEPCO), exhortó a las y los servidores públicos, partidos y a los actores políticos para que se abstengan de realizar promoción personalizada y propaganda político electoral en las acciones de ayuda humanitaria a los damnificados de los 283 municipios en los que fue declarado el desastre en Oaxaca.
A pesar de que se abrieron procedimientos sancionadores contra quien o quienes resulten responsables de estos actos, a la fecha ningún personaje ha sido sancionado.
Aunque pudiera haberse beneficiado, la tragedia también exhibió la decadencia de algunos funcionarios del gobierno federal en la atención de las comunidades afectadas.
Para el director general del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Juan E. Pardinas, los sismos exhibieron la decadencia de tres integrantes privilegiados del gabinete presidencial: Luis Enrique Miranda, Rosario Robles y Gerardo Ruiz Esparza.
Rosario Robles, titular de la Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), fue designada para coordinar los trabajos de ayuda y reconstrucción en Oaxaca, mientras Gerardo Ruiz Esparza es uno de los secretarios que realiza recorridos frecuentes para constatar el avance de la rehabilitación de las carreteras y puentes dañados por el sismo.
“Por separado, cada uno de ellos es un ejemplo impecable de la decadencia multidimensional de nuestros liderazgos políticos. En equipo, ellos son el parámetro de referencia para escribir la historia de este sexenio”, expuso Juan Pardinas.
