Oaxaca carece de Atlas de Riesgo actualizado, denuncian
Urge destinar mayor presupuesto a la capacitación y creación de direcciones de PC en los 570 municipios, opina Horacio Antonio
El Atlas de Riesgo de Oaxaca no ha sido actualizado desde hace 7 años y ante los últimos eventos sísmicos, es urgente que el gobierno del estado no sea omiso en el tema, afirmó Horacio Antonio Mendoza, diputado local del PRD en el Congreso del estado.
Ayer, un puente vehicular colapsó en la comunidad de Asunción Ixtaltepec y varias casas terminaron de derruirse en el municipio de Juchitán de Zaragoza, luego del sismo de 6.1 grados Richter con epicentro en Unión Hidalgo, Oaxaca
También se registraron algunos daños en las instalaciones de la base aérea de Ciudad Ixtepec, sede del bunker de funcionarios del gobierno del estado y federal, al ser instalado ahí el Puesto de Mando para coordinar las operaciones de apoyo y distribución de ayuda humanitaria.
Antonio Mendoza dijo que se deben asignar mayores recursos económicos al tema de prevención de desastres y capacitación a los ciudadanos desde las escuelas, al ser las nuevas generaciones de ciudadanos.
El legislador del PRD en el Congreso local consideró necesaria la comparecencia urgente del nuevo titular de la Coordinación Estatal de Protección Civil de Oaxaca (CEPCO), Heliódoro Díaz Escárraga, para conocer el estado que guardan las alertas sísmicas y bocinas de alertamiento.
“El cese del anterior funcionario, Amando Bohórquez Reyes, no resolvió la crisis que se vive en el Istmo de Tehuantepec y mucho menos atendió la falta de bocinas de alertamiento en la capital y municipios conurbados, al operar a su mínima capacidad, pese a que siguen los sismos”, dijo.
El legislador local lamentó la falta de operatividad por parte del gobierno del estado para atender la crisis por el sismo del 7 de septiembre, no solo en el Istmo sino en la región de los Mixes, Mixteca y Sierra Norte, en donde los afectados siguen en el abandono oficial.
Reconoció la solidaridad de la gente, quienes se organizaron y fueron los primeros que apoyaron en labores de remoción de escombros, atención de heridos y suministro de víveres para los más de 120 mil damnificados.
Externó a los 570 ayuntamientos a crear sus direcciones de Protección Civil y asignar personal para estar atentos a los sismos, daños por lluvias o cualquier situación por desastres naturales en una entidad como Oaxaca, la cual ha vivido más de 4 mil replicas desde el siniestro del 7 de septiembre.
