Piden conservar la arquitectura antigua y tradicional de Oaxaca

Al exponer su conferencia magistral “Reconstrucción con Tierra a dos Años de los Sismos en la Mixteca y Sierra Mixe”, el arquitecto Juan José Santibáñez García, se pronunció por conservar la arquitectura antigua y tradicional de las comunidades afectadas por los terremotos que azotaron la entidad oaxaqueña en 2017.

“Tenemos que hacer conciencia de lo que tenemos y valemos, cuando fuimos a los pueblos nos dimos cuenta que están abandonados a su suerte, no sabían cómo levantarse ante el impacto y en los lugares donde llegó la mano del gobierno, se utilizó un sistema innovador que va dejando lo tradicional”.

Expuso que al ser considerado por la Fundación Alfredo Harp Helú para trabajar en estas regiones, el objetivo fue recuperar lo tradicional, la arquitectura es tan rica que está lleno de valores, me tocó estar en la Sierra Mixe y Mixteca, mi grupo solamente alcanzamos a realizar 100 casas pero que valieron la pena”.

“Las autoridades pudieron haber levantado 5 mil casas, pero el trabajo es muy pobre sin planeación alguna, cuando llegamos a estos lugares nos tardamos 4 meses de convencer a la gente que se podían recuperar algunas viviendas antiguas y de gran valor, porque primero era llegar al corazón de las casas de la gente”.

“La casa es por excelencia el espacio arquitectónico donde se genera toda la cultura y toda una vida, en algunos lugares parte de las casas lo llaman como parte de nuestro cuerpo por eso los valoran tanto”, destacó.

Dio a conocer algunas intervenciones que se realizaron en los municipios que se localizan desde Huajuapan de León hasta Mariscala de Juárez en la Mixteca, así como en los Mixes, donde la mayoría de las viviendas recuperaron su arquitectura original.

“Muchas de las casas dañadas tenían arreglo, lo único que hicimos fueron reparaciones para recobrar las casas como estaban, a lo mejor no como estaban pero lo más importante fue recuperar su valor utilizando material nativo”.

“La arquitectura es una vivencia, no es un producto, cuando se trabaja de esta manera hay una comunicación y comunión con las comunidades, la arquitectura no es solamente algo bonito, no tenemos que servirnos de la arquitectura para hacer dinero, sino verlo como un servicio y arte”, apuntó.