Aumentan indigentes en zonas de afluencia turística de Oaxaca
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Aumentan indigentes en zonas de afluencia turística de Oaxaca

En las inmediaciones del templo de San Agustín, el parque Labastida o el parque Morelos, varios indigentes o personas alcoholizadas se mantienen en la zona sin que intervengan las autoridades.


Aumentan indigentes en zonas de afluencia turística de Oaxaca | El Imparcial de Oaxaca

En plena temporada vacacional de Semana Santa, diferentes zonas de afluencia turística de la ciudad de Oaxaca han sido invadidas por personas en situación de indigencia o en estado de ebriedad.

Desde temprana hora, en las inmediaciones del templo de San Agustín, el parque Labastida o el parque Morelos, varios indigentes o personas alcoholizadas se mantienen en la zona sin que intervengan las autoridades.

Y aunque varios se han mostrado agresivos o acosan a los transeúntes, los elementos de vigilancia y seguridad no intervienen para su retiro, al asegurar que estos regresarán horas más tarde o al día siguiente.

En el Parque Labastidaal menos una decena de hombres adultos ingiere bebidas alcohólicas y se adueñan de las banquetas del lugar, además de asearse y hacer sus necesidades fisiológicas en la fuente.

Ante la mirada de cientos de visitantes nacionales y extranjeros, así como propios de la entidad, los indigentes pasean por las principales calles del primer cuadro de la Ciudad, donde se dedican a pedir dinero.

A unos metros donde apenas se inauguró la Expo Feria artesanal de Semana Santa 2019, personas en estado de ebriedad esperan el paso de turistas extranjeros para seguirles el paso y solicitarles algunas monedas.

Algunos elementos de la Policía Municipal apenas sí intervienen, porque solo se acercan para advertir a los indigentes que no molesten a los turistas, pero no para que se retiren por completo del lugar.

En las inmediaciones de la Iglesia de San Agustín pasa lo mismo, pese a que elementos de la Policía Estatal habían asegurado que ese espacio ya era seguro y libre de personas en estado de ebriedad.

Las calles del Centro Histórico de la ciudad, además de decenas de puestos ambulantes, ofrecen a los turistas la imagen de hombres alcoholizados a cualquier hora del día.