Prevalece la medicina indígena tradicional en Tlaxiaco

Las plantas medicinales y el conocimiento antiguo de los médicos indígenas, levantamiento de espantos, empachos, baños de toritos, sigue siendo un medio para curar espiritual y físicamente a las personas en la clínica de la medicina indígena tradicional.

Esta clínica que se ubica en el kilómetro 54.5 de la carretera a Yucudaa con más de 10 años de servicio se integra con cinco médicos indígenas tradicionales que atiende los siete días de la semana, es una opción de sanación de los enfermos haciendo uso de las plantas medicinales.

MÉDICO TRADICIONAL

Margarito Mendoza Cruz, médico tradicional, da a conocer, que esta tradición de sanación de las personas se mantiene poco, pero los conocimientos para la sanación está activa a través de sus compañeros que hacen diversas especialidades como sobadas, mal de ojo, levantamiento de espanto, el empacho, limpias y el baño de temazcal.

Él se dedica a las limpias, sobadas, masajes, mal de ojo, pero también tienen un altar donde se pide que a las personas les vaya bien en sus trabajos, a los estudiantes en sus exámenes, que los migrantes estén bien y que las personas desaparecidas aparezcan, es un servicio que se otorga a quienes lo solicitan, ya que se ofrecen los rezos durante tres veces al día a imágenes católicas.

CLÍNICA INDÍGENA TRADICIONAL

La clínica indígena tradicional desde hace 10 años ubicada en la ciudad de Tlaxiaco surgió a raíz de la necesidad de mantener estos conocimiento natos de las personas que se dedica a curar, pero además están constituidos en la organización de médicos indígenas tradicionales de la Mixteca Alta (OMIMA).

Actualmente, cuenta de áreas como una farmacia, sala de curación, donde hacen las limpias, masajes, lectura de barajas, levantamiento espiritual, el área de los baños de temazcal, área de curaciones en general y espacio para la adivinación y lectura de barajas.

AYUDA PARA LAS MUJERES

Juana Chávez Santiago, partera, da a conocer que a ella acuden mujeres que no pueden tener bebés y con los conocimientos antiguos y yerbas medicinales ha logrado que cumplan sus sueños.

Ha logrado que muchas parejas —pueden ser más de 200— quienes ya lograron tener hijos a base de la medicina de las plantas medicinales; por ejemplo, atendió a una mujer que llevaba más de cinco años de casada y no ha podido tener bebé, la atendió y el resultado fue exitoso.

Da a conocer que no han fallado sus curaciones en este tema; por ejemplo, una señora logró tener gemelos y otra que visitó varios médicos de bata blanca a 10 años llegó a sus manos y hoy ya tiene dos hijos, una niña y un varón.

En la clínica de la medicina indígena tradicional, otra de las curanderas, doña Josefina José González, sobadora, da a conocer que piden de sus servicios personas que tienen adolorido el cuerpo, de torceduras y otros.

OTROS DOLORES

Soba a las personas cuando tienen dolor de espalada, pies, cuando están inflamados del estómago o caída de matriz, también acomoda a los bebés en las mujeres cuando están embarazadas, atiende los empachos, caída de moyera, a los bebés que lloran mucho, este es un asunto que los médicos de bata blanca no lo pueden quitar.

En su comunidad hay muchas personas que aún saben de los dones de curar con la medicina indígena tradicional, todos los habitantes de esta comunidad de la región Mixteca nacieron con una partera, aunque en nuestros días muchos jóvenes la han ido olvidado.

Para curar la diarrea, vómito o calentura se cura, con chamiso blanco y huele de noche, yerba amarga como yucutuche son buenas para el latido, son varias plantas, pero que la lengua española no las conoce por su nombre, sólo en mixteco, sus propiedades son conocimientos que desde hace muchas generaciones la gente sabe.

Con yerbas calientes y baño de temazcal, se quita lo inflamado de los intestinos o la frialdad del estómago, es un sufrimiento que en muchas ocasiones afecta sobre todo a las mujeres que durante muchos años se dedicaron a hacer tortillas y también a los campesino que trabajan el campo que estando en un ambiente de calor les pega la lluvia y el viento frío.