Olores fétidos inundan calles de la capital de Oaxaca

El olor a flor de Cempasúchil contrasta con los aromas que emanan de las decenas de bolsas negras que lucen apiladas en las principales calles de la capital.

Y es que, desde hace tres días colonos de la agencia Vicente Guerrero de la Villa de Zaachila, localizada en los alrededores del tiradero municipal, volvieron a cerrar los accesos al tiradero municipal.

Desde el pasado jueves, los habitantes que mantienen una abierta disputa con los militantes de la organización Frente Popular 14 de Junio, se inconformaron por una supuesta incursión policial y militar en la zona.

La radical medida tuvo sus consecuencias de forma casi inmediata en la capital y municipios conurbados, quienes depositan en las vialidades decenas de toneladas todos los días, por lo que esta situación ha vuelto a convertirse en una crisis.

Calles como Hidalgo, Flores Magón, Las Casas, 20 de Noviembre, Valdivieso, Guerrero, Colón y Bustamante, han sido tomadas como tiraderos al aire libre por parte de comerciantes y ciudadanos que no han aguardado la reactivación del servicio de recolección de basura.

Bolsas negras han sido destruidas por la fauna y perros callejeros, quienes se disputan durante el día y la noche los desechos que son arrojados a las banquetas y que no han sido levantados por los trabajadores de Limpia.

Algunos vecinos afectados por la acumulación de desechos y malos olores que emanan de las bolsas de plástico, exigieron a la autoridad municipal habilitar nuevos espacios para depositar la basura en tanto abren el tiradero de Zaachila.

Incluso, han cuestionado la convocatoria de las autoridades municipales a que visiten la capital en la temporada de muertos, toda vez que se quiere traer más turismo nacional e internacional, pero las calles lucen sucias.

Los montones de basura no son privativos del centro histórico de la capital, sino también de las colonias ubicadas en la periferia y en municipios como Santa Cruz Xoxocotlán y Santa Lucía del Camino.