Recibir a los turistas con alegría, pide arzobispo de Oaxaca
Celebremos a quienes vendrán porque asisten a disfrutar de nuestra cultura e historia: Pedro Vázquez Villalobos.
En la preparación para la Guelaguetza, el arzobispo de la arquidiócesis de Antequera-Oaxaca, Pedro Vázquez Villalobos, pidió a los oaxaqueños ser buenos anfitriones y recibir a los turistas con alegría, gozo, bondad y amor.
En su mensaje dominical en la catedral de la ciudad capital, el purpurado lanzó su mensaje frente a las grandes fiestas que se enmarcan con la festividad de la Virgen del Carmen y que tienen un tinte sin duda religioso.
“Vendrán muchos a visitarnos, a vivir nuestra Guelaguetza, se alegrarán con nosotros, vendrán a compartir; por lo que compartan su alegría, su gozo, su ilusión, la bondad y el amor, celebremos a quienes vendrán porque asisten a disfrutar de nuestra cultura e historia”, dijo.
Monseñor pidió contagiar a las personas de esta entidad, a las de otros estados y países a vivir la Guelaguetza, dando la mejor bienvenida con alegría de compartir las tradiciones.
“Debemos vivir la espiritualidad que está en los bailes de los pueblos y regiones”, conminó el arzobispo de la Arquidiócesis de Antequera.
En este marco, al dar su mensaje a los creyentes católicos que asistieron a la misa de las 12:00 horas, el purpurado pidió liberarse de sentimientos negativos: “encuentre la paz, nuestro señor lo necesita libre y feliz, no lo necesita cargando amarguras, desilusiones, desencantos.
“Estamos muy enfermos de nuestros sentimientos, a veces vamos cargando con odios, con rencores, con envidias, con deseos de venganza, porque seguimos aplicando aquella ley de: ‘ojo por ojo, diente por diente’ o aquel dicho de, ‘me la hiciste me la pagas’”, ahondó.
Observó en la sociedad la prevalencia de la falta del amor, en no vivir en la misericordia ni en el perdón, y por el contrario, se van arrastrando los odios y los rencores.
“Dios los necesita llenos de esperanza, llenos de fe, fuertes, con amor; porque tenemos que llegar a otras personas, levantarlos y sanarlos”, expresó.
Pidió no perder el tiempo y hacer mucho por los demás siendo instrumento de la buena acción.
