Se preparan para Donají…La Leyenda en Oaxaca
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Se preparan para Donají…La Leyenda en Oaxaca

El espectáculo dancístico se lleva a cabo una noche antes del Lunes del Cerro, en el marco de las festividades de la Guelaguetza


Alrededor de 83 jóvenes que integran el ballet Folclórico de Oaxaca a diario realizan arduos ensayos para llevar a cabo la representación del espectáculo dancístico de luz y sonido, Donají…La Leyenda, el cual se lleva a cabo cada año la noche del domingo anterior a los tradicionales Lunes del Cerro, en el marco de las festividades de la Guelaguetza.

El evento en el que participan los integrantes del ballet, entre ellos hombres y mujeres de todas las edades, se lleva a cabo los dos últimos lunes del mes de julio en el Auditorio de la Guelaguetza ubicado en el Cerro del Fortín, por lo que los ensayos inician desde el mes de febrero. A diario, los participantes se reúnen a las 19:00 horas y durante dos o tres horas realizan su trabajo en el segundo patio del Palacio Municipal.

El mes de junio se estima que los ensayos se van a llevar a cabo en el Auditorio Guelaguetza, para comenzar a trabajar en el lugar y con el espacio que se va a utilizar. En tanto se lleva a cabo una audición con los integrantes del ballet que quieran participan en la representación de todos los personales que existen en la trama de la obra, entre de ellos el de la princesa Donají, el Lirio, el pastor, Nucano y el príncipe Cosijoeza.

ELIGEN PERSONAJES
El director del ballet, Fernando Rosales García, dijo a EL IMPARCIAL que para el espectáculo que se realiza desde hace 36 años de manera consecutiva, se requieren de al menos 5 personas para elegir a cada uno de los personajes y hasta el momento no se ha determinado quien será la joven que represente el papel central de la Princesa Donají.

Cabe señalar que el año pasado lo representó la joven Karla Platas; sin embargo, en esta ocasión la elección se va hacer luego de una audición de las chicas que quieran participar, “normalmente se elige a la persona de acuerdo con sus posibilidades escénicas”, subrayó el director.

Cuando se tiene una representación, externó, al siguiente año se confían y ya no muestran ningún interés, todo se vuelve rutinario, la elección es a nivel de una propuesta para que de esa manera ellas encuadren en esa necesidad y saquen el mejor provecho y el espectáculo tenga un mejor resultado para el público.

Siempre se hace algo nuevo para que luzca el evento, sobre que el público con su presencia da a conocer si le gustó o no, “los invitamos para que nos vayan a ver, para que tengamos sus críticas y la retroalimentación, si les gusta que nos recomienden y seamos todos partícipes de estas festividades y propiamente del espectáculo Donají…La Leyenda.

ESTOY SATISFECHO, AFIRMA DIRECTOR
Hace 36 años, Fernando Rosales García dejó a un lado su profesión para dedicarse de lleno a lo que le gusta hacer en cuerpo y alma. Estudió Danza, la cual —durante todo ese tiempo— le ha dado muchas satisfacciones, motivo por el cual se siente orgulloso de estar al frente del ballet Folclórico de Oaxaca.

“Yo nunca he hecho nada para satisfacer mi ego”, asentó “simplemente como oaxaqueño he puesto algo para que la gente vea un espectáculo de parte de la historia con dignidad, responsabilidad y conocimiento. La gran satisfacción es tener una fiesta digna, tener todas las posibilidades escénicas para ofrecer un evento de primer orden”.

Y agregó “no me podía dedicar a otra cosa, creo que nací para esto. En la vida dejé muchas cosas en el camino para dedicarme a esto, por ser muy comprometido, cuando renuncié a la otra parte de la profesión y me dediqué a estudiar danza fue parte de lo que quería hacer, como consecuencia estoy metido en esta y en otras cuestiones de carácter dancístico que me han traído muchas satisfacciones”.

“Me siento todavía con mas ánimos, ahora son los hijos y nietos de los primeros grupos los que acuden a trabajar, es muy satisfactorio tener una familia artística muy grande, en todos lados nos encontramos gente que ha colaborado y que después —aun de que ahora son sus otros familiares los que participan— se sienten como parte de esta gran familia”.

“No hay cosa más padre y más bella que tener la satisfacción de dirigir y producir a la agrupación, hacer, contribuir y estar con toda esa cantidad de personas que nos van a visitar. Hay muchos jóvenes en la casa, todo mundo está con esto, además se está preparando gente para que en un momento determinado alguien prosiga con esto”.