En Santa María Xadani devoción a Esquipulas en medio de la tragedia
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En Santa María Xadani devoción a Esquipulas en medio de la tragedia

La fe sigue intacta y mueve a miles a los pies del “Cristo Negro” para pedir una petición o cumplir una promesa


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El “Santuario del Mar”, la capilla en honor al Santo de Esquipulas en Santa María Xadani, en el Istmo de Tehuantepec, es el segundo santuario más visitado en el Sur del país y en Centroamérica, después de la imagen que está en Guatemala, en esta fecha en la que se celebra al “Cristo Negro”.

Esta pequeña población zapoteca, situada junto a la Laguna Superior del Golfo de Tehuantepec que colinda con el Océano Pacífico y donde se erige un altar en honor al Santo, fue una de las más devastadas por los sismos de septiembre. Pero la fe sigue intacta y mueve a miles a los pies del “Cristo Negro”, ya sea para petición especial, sanar sus enfermedades, pagar una promesa o incluso por haberles puesto a salvo durante los sismos.

Verónica Jiménez es una devota del Cristo de Esquipulas. Desde hace 22 años prepara el caldo de pescado, que, como tradición, degustan los visitantes cada 15 de enero a unos metros de la Laguna Superior, a las afueras de la capilla.

Verónica —hace 22 años— se encomendó al “Cristo Negro”, no pidió riquezas, “sólo fuerzas para trabajar, que mi esposo y yo estuviéramos con vida”, dijo.

Ella y su familia sufrieron los estragos del sismo, pero están en pie y su fe intacta. “Creemos que nuestro Señor de Esquipulas nos libró”.

La festividad se remonta desde el año de 1930 para pedir por la abundancia de los productos del mar y la buena cosecha, en un pueblo de pescadores y campesinos. Incluso, visitantes de todo el país llegan a venerar esta imagen en Santa María Xadani, comunidad ubicada a 276 kilómetros de la capital oaxaqueña, para no acudir hasta Guatemala.

Desde la tarde del 14 de enero, una peregrinación con una “calenda” parte de la comunidad y se traslada a más de dos kilómetros del pueblo hasta las orillas de la laguna donde se encuentra el santuario. Su devoción al Santo de Esquipulas los lleva a velar la noche en el santuario. Otros van a descansar unas horas pero desde las 5:00 de la mañana regresan a ofrecer Las Mañanitas al “Cristo Negro” en la pequeña capilla.

Durante todo el día, los lugareños regalan caldo de pescado a los peregrinos. Los pescadores ofrecen los productos después de un día de trabajo, en espera de una bendición.

“Cada año estamos dando este tequio, nosotros como somos pescadores y esta iglesia aquí está y el santo aquí está, yo vengo a dejar un termo y estoy pidiendo que mañana, pasado mañana Dios me dé más pescados”, expresó un pescador.

Según los pobladores, la imagen fue hallada a orillas de esta laguna por un pescador zapoteca y le pidió una buena abundancia de los productos del mar. Cuentan los ancianos que por la noche, esta persona soñó con la imagen que le pedía construir una capilla a orillas del mar y fue así como se empezó a venerar a este santo en esta zona de Oaxaca.
Según los lugareños, esta imagen es una réplica de la que se encuentra en Guatemala.

En esta celebración hay una mezcla de alegría y fiesta con la veneración de los fieles al “Cristo Negro”.

Cada año acuden entre 15 y 20 mil fieles a esta celebración que deja una derrama económica importante a la pequeña comunidad zapoteca de Santa María Xadani.