¿Mal aliento? ¡Ponle un alto ya!
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¿Mal aliento? ¡Ponle un alto ya!

Este padecimiento es más común de lo que piensas y muchas veces se resuelve cambiando los hábitos de higiene bucal


¿Mal aliento? ¡Ponle un alto ya! | El Imparcial de Oaxaca

Sientes vergüenza y ansiedad, aunque uses enjuages bucales, gomas de mascar u otros productos el alivio es sólo temporal, el mal aliento regresa al cabo de unas horas. Lo ideal es terminar el problema de raiz.

Existen algunos hábitos cotidianos que hacen que el mal aliento aparezca, aunque también puede ser causado por enfermedades y alimentos. Ante ello lo ideal es mantener una adecuada higiene dental y constante, si a pesar de esto el mal aliento no desaparece es mejor visitar a un especialista ya que esto podría ser más grave.

Expertos de Clinica Mayo indican que el mal aliento varía según el origen o la causa. Algunas personas se preocupan demasiado por el mal aliento, pese a tener muy poco o nada de olor en la boca; en cambio, otras personas tienen mal aliento y no lo saben. Debido a que es difícil evaluar el propio aliento, pide a un amigo cercano o pariente que resuelva tus dudas acerca del mal aliento.

¿CONSULTAR AL MÉDICO?

Si realizas una observación exaustiva de tus hábitos de cuidado dental y te cepillas los dientes adecuadamente, limpias tu lengua, usas hilo dental y bebes muha agua y a pesar de ello tienes mal aliento, debes visitar al médico, pues un transtorno más grave podría ser la causa.

CAUSAS: 

Alimentos. La La descomposición de partículas de alimentos en los dientes y alrededor de ellos puede aumentar la cantidad de bacterias y causar un olor desagradable. Comer ciertos alimentos, como cebollas, ajo y especias, también puede causar mal aliento. Después de digerirlos, los alimentos ingresan en el torrente sanguíneo, son transportados a los pulmones y afectan el aliento.
Productos del tabaco. El hábito de fumar deja su propio olor desagradable en la boca. Los fumadores y quienes consumen tabaco, son más propensos a tener encías enfermas, que son otra fuente de mal aliento.

Mala higiene bucal. Si no te cepillas los dientes y usas hilo dental a diario, habrá partículas que queden en tu boca y produzcan mal aliento. Además, se forma sobre los dientes una película incolora y pegajosa producida por las bacterias (placa) Si no se la cepilla, la placa irrita las encías y finalmente forma bolsas llenas de placa entre los dientes y las encías (periodontitis). También la lengua puede atrapar bacterias que producen olor. En las dentaduras postizas que no se limpian con regularidad o que no encajan bien pueden quedar bacterias y partículas de alimentos que causan olor.

Boca seca. La saliva ayuda con la limpieza de la boca porque elimina las partículas que causan mal olor. Hay una enfermedad llamada “boca seca”, o xerostomía, que contribuye al mal aliento porque en ella disminuye la producción de saliva. La boca seca ocurre naturalmente durante el sueño y a eso se debe el mal aliento de la mañana, que empeora cuando uno duerme con la boca abierta. Si la boca seca es crónica, la causa podría ser algún problema en las glándulas salivales o ciertas enfermedades.

Medicamentos. Algunos medicamentos contribuyen a la sequedad de la boca y, por lo tanto, indirectamente provocan mal aliento. Otros se descomponen en el organismo y liberan sustancias químicas que se transportan al aliento.

Infecciones en la boca. El mal aliento puede ser causado por las heridas quirúrgicas después de una cirugía bucal, como la extracción de un diente, o porque hay caries, enfermedad de las encías o llagas bucales.

Otras afecciones de la boca, la nariz y la garganta. En ocasiones, el origen del mal aliento pueden ser pequeñas piedras que se forman en las amígdalas y se cubren de bacterias, lo que produce olor. También las infecciones o la inflamación crónica en la nariz, los senos paranasales o la garganta, que contribuyen al goteo nasal posterior, pueden provocar mal aliento.

Otras causas. Las enfermedades, como algunos tipos de cáncer, y otras afecciones, como los trastornos metabólicos, pueden producir un mal aliento distintivo debido a las sustancias químicas que producen. El reflujo crónico de los ácidos estomacales (reflujo gastroesofágico o GERD) puede asociarse con mal aliento. En los niños pequeños, el mal aliento puede ser causado por algún cuerpo extraño, tal como un trozo de alimento, alojado en una de las fosas nasales.

TRATAMIENTO

Para reducir el mal aliento, prevenir las caries y disminuir tu riesgo de sufrir enfermedades de las encías, mantén siempre una buena higiene bucal. El tratamiento posterior para el mal aliento puede variar, según la causa. Si se piensa que tu mal aliento se debe a una afección no diagnosticada, es probable que el dentista te derive a tu médico de cabecera.