En Escena

Los cinco momentos más surreales de la visita de Kanye West a la Casa Blanca

Hoy despertamos con la sensación de que todo había sido un mal sueño, pero no fue así.

sábado, 13 de octubre de 2018 | 16:32 horas

Agencias

Con información de ,

La aclaración sobre su trastorno bipolar

Si tienes unos minutos para hablar con el presidente del país más poderoso del mundo, ¿por qué no aprovechar para aclararle que fuiste diagnosticado erróneamente con trastorno bipolar. A Kanye no sólo le pareció pertinente hablar del tema, sino además informó al mundo cuál es en realidad la condición que lo aqueja: la privación de sueño, un estado constante de sueño limitado que además de provocar fatiga y somnolencia afecta negativamente al cerebro y la función cognitiva. La reforma al sistema penitenciario en Estados Unidos puede esperar.

Su contradictorio amor por Hillary

Y por todo el mundo. Sus palabras fueron “I love Hillary. I love everyone”. Pero lo que Kanye estaba tratando de explicar eran las razones por las que la campaña de Trump le pareció más atractiva que la de su rival femenina. Resulta que forma parte de una familia en la que no hay mucha energía masculina. Debido a esto, nunca logró conectar con la campaña I’m With Her, de Hillary. Es decir, su mensaje no lo haría sentir como el hombre que juega a la pelota con su hijo. EN CAMBIO, la campaña de Trump y su lema Make America Great Again no sólo lo ayudó a conectar perfectamente con su masculinidad, sino que, al momento de ponerse la polémica gorra con la frase, se sintió nada más y nada menos que Superman. Quien, dijo, es su superhéroe favorito. ¿Conclusión? Le agradeció a Trump por hacerlo sentir como Superman.

El efecto Yeezy que provocó al irse a Adidas

¿Para qué perder el tiempo hablando sobre las posibles maneras de disminuir la violencia en Chicago, donde recientemente fueron baleadas 74 personas en un fin de semana? Este iba a ser otro de los temas que se tocarían en el encuentro Kanye-Trump, pero el hecho de que Chicago esté enfrentando un índice de muertes violentas que no se había visto en veinte años resultó irrelevante ante la decisión de Kanye de dejar Nike e irse a Adidas con su línea de sneakers gracias a la cual, según dijo, consiguió transformar por completo la marca. Y a eso se le llama “efecto Yeezy”. Tomen nota.

Su pitch del iPlane 1

Nadie estaba entendiendo qué pasaba en la Oficina Oval. ¿Acaso todos saltamos por un momento a una realidad paralela en la que cada una de las palabras de Kanye tenía sentido? Nunca lo sabremos. El caso es que de pronto el rapero le mostró al presidente el iPlane 1. Dijo que era un avión propulsado por hidrógeno que reemplazaría al Air Force One. Aclaró que sería diseñado por Apple. “Lo que necesito para SNL y para los liberales para mejorar”, señaló. “Si el avión no se ve bien, nosotros no nos vemos bien”, añadió.

¿Qué hay de cierto sobre el iPlane 1? The Verge habló con el diseñador del avión, quien les contó que no es un producto secreto de Apple ni una idea original de Kanye. Se trata más bien de una pieza conceptual que formó parte del proyecto de tesis de maestría del diseñador industrial Shabtai Hirshberg en 2012, en el que se imagina el futuro de los viajes aéreos en 2030. Hirshberg explicó que no tenía idea de que Kanye estaba usando su idea para promoverla ante el presidente. El diseñador aclaró que su concepto no es nada realista actualmente, pues no hay materiales ni tecnología para hacerlo funcionar.

Trump, el héroe. Kanye, el loco motherfucker

En el universo paralelo concebido por Kanye West, Donald Trump es nada más y nada menos que un héroe. En el mundo real es el hombre que llegó al poder gracias a la injerencia rusa, el que niega el cambio climático y al que le gusta agarrar a las mujeres por la vagina. Es, según Kanye, un héroe incomprendido enfrentando su propia lucha. “Tal vez nunca pensó que tendría aquí a un loco motherfucker como yo (en la Casa Blanca)”, dijo.

El extra: “I love this guy right here.”

Abrazo incluido, faltaba más.